Al momento del análisis, el entrenador del "Remero", el
diamantino Andrés Grancelli, no ocultó su satisfacción por el juego del equipo
y el tercer puesto obtenido. "El balance es totalmente positivo.", aseveró
‘Paspa’, quien regresó al básquet femenino después de un par de años sabáticos
en la disciplina.
- En cuanto al juego, ¿terminás conforme con lo que ha
propuesto el equipo?
- Era la primera experiencia del club a este nivel, con
chicas que venían de varios clubes y yo me acoplé hace tres meses. Después del
partido por el tercer puesto se vio que las chicas estaban contentas, lo mismo
que los dirigentes, que agradecieron el trabajo que se realizó. Creo que fue
una muy buena experiencia y estamos felices con muchas cosas por mejorar.
Arrancamos la Liga con un equipo y terminamos con dos bajas
muy importantes (NdR: Maribel Barzola y Aldana Piñeiro dejaron el club para
jugar Torneo Federal) pero pudimos llegar al cuadrangular final y lograr el
tercer puesto. Fuimos competitivos en todo momento.
- ¿Cómo se sobrepusieron a la baja de estas dos jugadoras
claves?
- Fuimos sorteando muchas trabas en el camino. Piñeiro y
Barzola eran fundamentales para el esquema de nuestro juego, tanto ofensivo
como defensivo. Las demás jugadoras tomaron otros roles, estar más presentes en
la parte de ataque y por suerte estuvieron a la altura. Sí se nos acortó
muchísimo el equipo y nos costaba en el cierre de los juegos. Estoy muy
conforme con lo que dieron las chicas, fuimos sumando muchas cosas y por
momentos terminamos jugando bien al básquet y eso es lo importante. Por ahí
también un poco triste porque si hubiésemos podido mantener el equipo la
historia hubiese sido otra.
- ¿Cómo viste el nivel de la Liga a nivel general?
- El nivel de la Liga lo vi de menor a mayor. Cuando se
arrancó el torneo por ahí los equipos no estaban del todo bien, sobre todo los
que no tienen una competencia interna fuerte como la nuestra; sin embargo, con
el correr de los partidos se hicieron más poderosos todos los equipos, algunas
más otros menos, y fue más competitivo y quedó demostrado en el cuadrangular
final donde Luciano le hizo un gran partido a Talleres en semifinales y en el
juego nuestro ante Parque Sur, si bien terminó por 15 puntos, nos quebró en los
últimos cinco minutos. Ojalá se sumen más equipos para la próxima temporada.
- En lo personal, ¿cómo te sentís en el club y qué
expectativas para lo que viene en la institución?
- Me siento muy cómodo en el club, es una institución que está
haciendo sus primeras armas en el básquet femenino y en algunas cosas es todo
nuevo. Es un lindo desafío en el que me metí; acomodé todos mis horarios porque
quise participar cuando me llamaron ya que tenía ganas de volver a dirigir
básquet femenino. Me encontré con un club que te brinda todas las comodidades,
la dirigencia se porta muy bien, un grupo de chicas que es muy buena gente y
que se entregó al máximo.
Hay muchas cosas para corregir en todos los aspectos pero la
verdad que me estoy llevando una experiencia importante. Ojalá que el futuro de
Rowing sea para muchos años de Primera División y que el día de mañana pueda
tener todas las categorías.